Oración por los niños.

Bendito Santo Domingo Savio, tú que fuiste hijo ejemplar, cariñoso y respetuoso con tus padres y hermanos; que fuiste siempre buen estudiante, educado, cariñoso y caritativo. En la escuela de Don Bosco te ganaste la confianza y simpatía de tus educadores; te sentiste hermano de tus compañeros, y con tu nueva familia iniciaste el camino de la santidad, atiende las súplicas que hoy te hacemos.

Favorecido con los dones que Dios te dio, con oración, penitencia y devoción a la Virgen María, fuiste ejemplo para niños, jóvenes y mayores, y con ellos compartiste amor, alegría y devoción.

Tú que con entrega y amor ayudaste a tantos acuérdate, ahora que gozas en la gloria junto al Señor, de nuestros niños y jóvenes, vigila sus vidas para que no se alejen del Señor; dales aliento si desfallecen en los estudios, aléjalos de quien les puede dañar, protégelos ante cualquier adversidad, líbralos de malas compañías y de quien por mal camino los quiera arrastrar. No los dejes caer en tentaciones ni vicios y que en su vida tengan siempre presente que la «Santidad es alegría«. Amén.